Si te gustan los libros de historia y de misterio, El código Da Vinci de Dan Brown debe entrar en tu lista de próximas lecturas. Para que tengas un pequeño aperitivo, hemos decidido escribir un buen resumen de la historia, que no deja indiferente a nadie.
Religión, arte, cultura, asesinatos, investigaciones… No hay nada que falta en una de las obras maestras del autor norteamericano, que ha sido una de los grandes superventas de la literatura contemporánea.
Resumen por partes de El código Da Vinci de Dan Brown
El Código Da Vinci es una novela de misterio protagonizada por Robert Langdon y Sophie Neveu, que pronto se convierten en los héroes de esta historia. Él es un profesor experto en simbología religiosa y ella es criptógrafa.
Ambos se encuentran por primera vez en el Museo del Louvre investigando la muerte de Saunière, el abuelo de la chica. Este hombre ha sido asesinado y todo apunta a que la razón es que conocía la localización, y el secreto, del Santo Grial y de varios documentos que comprometerían al Vaticano.
Perseguidos por la policía al ser considerados sospechosos del crimen, Sophie y Robert van dando con diferentes pistas. La primera de ellas, una llave que encontraron en la escena del crimen, les lleva a una caja fuerte de un banco. Dentro de ella descubren un criptex, por lo que su siguiente parada es la casa de Teabing, un rico erudito conocido de Langdon.
Gracias a él descubran la contraseña del criptex y consiguen abrirlo. En su interior hay otro objeto de iguales características envuelto con una tela donde hay escrito un poema. Se encuentran, de nuevo, ante una incógnita. No obstante, esta primera reunión con Teabing les descubre otros muchos secretos. Al parecer existe la creencia de que el Santo Grial, que siempre se había pensado que era la copa de la que bebió Jesucristo en la última cena, es en realidad la tumba de María Magdalena. Esta mujer, cuenta la leyenda, llegó a casarse y a tener hijos con Jesús. Si esto fuese verdad, muchos de los dogmas cristianos caerían por su propio peso y, en la actualidad, habría descendencia.
En un momento dado aparece, avisado por el mayordomo de Teabing, Silas, el asesino de Saunière. Este hombre actúa bajo las órdenes de un «Maestro», que le obliga a matar, aparentemente, a todo aquel que quiera revelar el secreto del Santo Grial. Tras un forcejeo, consiguen reducir a Silas y con él se dirigen a Inglaterra, ya que es donde parecer enviarles el poema del criptex.
En Inglaterra Silas consigue escapar de nuevo, llevándose el criptex y a Teabing como rehén. Sophie y Robert deciden seguir las pistas para salvar a su amigo y recuperar el criptex. Así llegan a la Abadía de Westminster, donde se supone que está la clave para abrir el objeto. Allí se encuentran con Teabing, que se descubre como el «Maestro». Su obsesión es revelar el Santo Grial y todos los documentos asociados a su leyenda para destrozar así a la Iglesia. Amenazándolo con una pistola, le da a Robert el criptex para que lo descifre y sepan por fin cuál es la localización del Grial. Por suerte, Robert consigue distraer a Teabing para arrebatarle el arma justo en el momento en el que llega la policía.
Aunque por una parte todo esta solucionado, Robert terminó abriendo el criptex y decide ir con Sophie a Escocia, tal y como sugiere el mensaje que encontraron dentro. Allí llegan a la Rossalyn Chapel, donde Sophie se encuentra con su hermano pequeño y su abuela, a los que creía muertos. Se entera así que ella, junto a su hermano, es descendiente de María Magdalena y Jesucristo.
Resumen por partes de El código Da Vinci de Dan Brown
La novela consta de más de cien capítulos, muchos de ellos muy breves ya que cuentan los mismos hechos desde las perspectivas de cada personaje. Por esta razón, la forma más lógica de resumir El código Da Vinci con detalle y atender a las partes diferenciadas y a los hechos principales que ocurre, que son los que dividen el libro.
El asesinato con el que da comienzo El código Da Vinci
La novela comienza en el Museo del Louvre. En una de sus salas Silas, un obispo del Opus Dei albino, amenaza a uno de los curadores del museo: Jacques Saunière. Silas insiste en que Saunière le revele el lugar donde está escondido el Santo Grial, a lo que este termina respondiendo. Cuando cree tener ya la información, Silas lo asesina y lo deja solo en una de las salas del museo.
En su último hilo de vida, el comisario decide dejar alguna pista para que quien lo encuentre e investigue su asesinato descubra también el secreto sobre la localización del Santo Grial. Para ello, utiliza su propia sangre para dibujar un un pentáculo en su abdomen y un círculo en el suelo, colocándose luego en medio como si fuera El Hombre de Vitruvio. Además, deja en el suelo un mensaje escrito en tinta invisible y un código numérico.
Silas mientras tanto ha abandonado el museo y llama al «Maestro», del que no sabemos su identidad real. A él le traslada los datos que, antes de matarlo, le había dado Saunière, que la «piedra angular» (que se utilizaba como elemento constructivo) se encuentra en la iglesia de Saint Suplice de París. Supuestamente, esta piedra les llevaría no solo al Santo Grial, sino también a unos papeles que supondrían un antes y un después en la estructura del cristianismo. El Maestro le ordena pues que acuda a la Iglesia a continuar con la búsqueda de ese tesoro.
Al llegar y empezar a seguir las pistas, se da cuenta de que el comisario le engañó, aportándole información falsa. Loco de rabia e ira, mata como venganza a la Hermana Sandrine Bieil.
La investigación de la escena del crimen
En este capítulo Dan Brown nos presenta a la pareja de investigadores protagonista.
El primero en aparecer es Robert Langdon, un experto en símbolos religiosos y profesor en Harvard. Este hombre había recibido una invitación para reunirse con Saunière. Langdon se encuentra presentando su libro cuando el inspector Jerome Collet le interrumpe y le pide que se acompañe al Louvre para ayudar en la interpretación de la escena del crimen.
Ya en el museo el protagonista se encuentra con el capitán de policía al cargo de la investigación: Bezu Fache. Por el modo en el que le hace preguntas sobre su cita con Saunière, el profesor se percata de que lo considera sospechoso.
Al poco llega Sophie Neveu, investigadora de la policía y experta en criptografía. En un breve intercambio de palabras con Langdon, le da un número de teléfono, indicándole que es el de su embajada y que debe llamar. Cuando el profesor marca el número lo que escucha es un mensaje del contestador de Sophie en el que esta le indica que está en peligro y que, por su bien, debe reunirse con ella en el baño.
En el baño Sophie le explica que efectivamente Fache sospecha de él. La razón es que Saunière, en el mensaje que dejó, escribió: PS: encuentra a Robert Langdon. El jefe de policía interpretó PS como las siglas de post-data, pero Neveu sabe que en realidad significan «Princesa Sophie», ya que Saunière era su abuelo y se refería cariñosamente a ella así. Langdon por su parte cree que las letras pueden referirse a «Priorato de Sión», una hermandad que protegía el secreto que el curador de arte se llevó a la tumba.
La huida de Sophie Neveu y Robert Langdon
Sophie también avisa a Langdon de que Fache ha metido un dispositivo de seguimiento en su abrigo. Cuando lo saca, el profesor lo tira por la ventana, apuntando muy bien hacia un camión. Cuando el vehículo empieza a moverse, Fache piensa que el profesor está escapando, por lo que sale con todo su equipo a perseguirlo. Además, al mismo tiempo, recibe una llamada de que no han enviado a ninguna especialista en criptografía.
Antes de escapar, Neveu y Langdon visitan por última vez el cuerpo de Saunoère. Allí ven la otra parte del mensaje que dejó, consistente en la serie de número de la sucesión de Fibonacci, solo que estos aparecen desordenados. En matemáticas, se conoce a la sucesión de Fibonacci a una sucesión infinita de números naturales. Esta es famosa por aparecer en elementos biológicos que se consideran bellos por naturaleza, estableciéndose una relación con el número áureo.
Robert y Sophie descifran que esta sucesión desordenada en realidad forma un anagrama que les lleva hasta una de las pinturas de Da Vinci. Detrás de ese cuadro encuentran una llave.
Ya fuera del museo, la pareja está en busca y captura por parte de la policía. Intentan pedir ayuda yendo a la embajada de los EE.UU., pero está rodeada de agentes. Como técnica de distracción, compran unos billetes de tren, aunque nunca llegan a utilizarlos. No obstante, esto les da algo de tiempo para ir al banco a donde pertenece la llave.
Durante el trayecto hacia al banco Langdon da más datos sobre el Priorato de Sión. Al parecer, esta organización, cuyo «ejército» son los Caballeros Templarios, protege varios documentos secretos y también el Santo Grial. El libro que acaba de publicar y estaba presentando antes trata este tema.
El hallazgo del criptex
Robert y Sophie llegan al banco. Enseguida son descubiertos como huidos de la justicia, pero se dan la suficiente prisa como para llegar a la caja fuerte que abre la llave de Saunière. Dentro de ella se encuentra un criptex. Este objeto en forma de cilindro que se usaba para enviar mensajes y que, este en concreto, había sido fabricado por el abuelo de Sophie siguiendo las antiguas instrucciones de Leonardo Da Vinci.
La pareja protagonista sabe que dentro del criptex hay un mensaje importante, pero abrirlo no es fácil. La cuestión es que tienen que alinear los componente cilíndricos según una contraseña secreta. El problema es que si se intenta abrir con una contraseña incorrecta, dentro del cilindro se romperá una botellita de vinagre que destrozará el mensaje.
Cuando la policía ya estaba llegando al banco, el gerente y amigo de Saunière reconoce a Sophie y les ayuda a escapar. Para ello los mete en un vehículo blindado y él mismo les conduce fuera de París. Sin embargo, sus intenciones no son tan nobles, ya que en cuanto han salido de la ciudad se enfrenta a ellos para robarles el criptex. Por suerte, consiguen huir.
La leyenda del Santo Grial
El siguiente lugar al que se dirigen Sophie y Robert es la casa de Sir Leigh Teabing, un historiador colega de Langdon. Su objetivo es que les ayude a descifrar el criptex, aunque antes Teabing les pone al corriente del Santo Grial, de su leyenda y de sus propias deducciones.
La leyenda alrededor del Santo Grial cuenta varias cosas que, si se encontrasen los documentos que las atestiguan, harían tambalear el sistema cristiano. Por un lado, plantea que la Biblia no es fruto de Dios, sino del emperador romano Constantino, y que la divinidad de Jesús fue elegida, por votos, en el Concilio de Nicea, por lo que no había una predestinación ni un embarazo divino. Sin embargo, lo más problemático es que estos documentos asegurarían que María Magdalena llegó a casarse y a tener hijos con Jesús.
La leyenda por tanto cuenta que María Magdalena, que procedía de una familia real, estaba embarazada cuando crucificaron a Jesús. Ella huyó a Francia, donde dio a luz a su hija Sara y fue acogida y protegida por unos judíos de Marsella. Por lo tanto, si esto fuese verdad, hoy en día habría descendiente de Jesucristo. Teabing declara también que es posible que el Santo Grial no es una copa, sino la tumba de María Magdalena.
Este secreto lo descubrieron hace años los Caballeros Templarios cuando entraron en Jerusalén (en 1099). Desde entonces, el Priorato (del que formaba parte Leonardo Da Vinci) han protegido este secreto. No obstante, esta organización parecía estar dispuesta a revelar todo y por eso Saunière estaban siendo asesinados.
La aparición de Silas
Mientras Sophie y Robert hablan con su anfitrión, el mayordomo de este, Rémy, hace una llamada alertando de que la pareja protagonista se encuentra en la casa.
Aparece entonces Silas, que ataca a Robert con un golpe en la cabeza, dejándole inconsciente. Afortunadamente, Teabing y Neveu reaccionan rápido y consiguen reducir a Silas. Justo en ese momento se oye llegar a la policía, por lo que no pierden más tiempo y los tres, junto a su prisionero y Rémy (del que no sospechan), se embarcan en el avión privado de Teabing.
En el avión, logran encontrar cuál es la palabra secreta que abre el criptex: Sofía. Dentro sin embargo encuentran otro criptex envuelto con un poema donde se mencionan una órbita, una tumba y un muerto enterrado por «Pope» («Papa» en inglés). Teabing dice saber de qué se trata: la iglesia del Temple, donde están enterrados los caballeros asesinados por el Papa.
Durante el trayecto, Sophie explica por qué se había distanciado de su abuelo. Al parecer, una vez regresó a casa por sorpresa y, en el sótano, se encontró a su abuelo con otras personas, todas enmascaradas, realizando un ritual en el que entonan alabanzas a la diosa mientras una mujer permanece, tumbada, en el centro. Desde entonces, Sophie rompió contacto con Saunière.
El destino de los seguidores del Maestro en El código Da Vinci
Como el inspector Fache sabe que han huido en avión, avisa a las autoridades inglesas, que esperan en el aeropuerto al aterrizaje de los prófugos. A pesar de este contratiempo, Sophie, Robert y Rémy (con Silas aún atado) consiguen escapar justo antes de aterrizar y meterse en una limusina que Teabing había preparado para ellos. Cuando la policía comprueba el interior del avión, ya no están.
Vuelve a reunirse todo el grupo en la iglesia del Temple. Allí Rémy libera a Silas, confesándose también seguidor del Maestro. Se produce entonces uno de los momentos de más tensión de la novela. Silas toma como testigo a Teabing y obliga así a Langdon a entregarle el criptex.
Ya libre, Silas recibe una llamada del Maestro, que le insta a darle el criptex a Rémy para que este se lo entregue directamente. El mayordomo de Teabing y el Maestro se reúnen por tanto en un parque y, una vez que tiene el criptex en su poder, el Maestro envenena a Rémy. Posteriormente, llama a la policía para darles el chivatazo de donde está Silas. Cuando acuden a arrestarle, el asesino trata de huir y recibe un tiro de los agentes.
La Abadía de Westminster
Sophie y Robert siguen investigando para recuperar el criptex y encontrar también a Teabing, que suponen que está en manos del Maestro.
Sus investigaciones les llevan a la Abadía de Westminster, ya que descubren que «Pope» no se refería al Papa, sino a Alexander Pope, quien enterró a Isaac Newton en la famosa abadía. Allí se encuentran con un mensaje del Maestro, que asegura tener a su amigo Teabing como rehén en el jardín.
Cuando llegan, Sophie y Robert descubren que el Maestro y Teabing son la misma persona. Confiesa que mató a Saunière porque este no quería seguir adelante con el plan de desvelar los secretos del Santo Grial. La razón es que sabía que, si lo hacían, Sophie correría peligro. Su objetivo por tanto es resolver él solo todo el misterio y destruir así el Vaticano, pero para eso necesita que Langdon y Neveu le ayuden a descifrar el criptex.
Teabing le entrega el misterioso objeto a Robert y, apuntándole con una pistola, le obliga a encontrar el modo de abrirlo. El protagonista descubre que la contraseña es la palabra «apple» («manzana» en inglés), la fruta que tan importante fue para el descubrimiento de Newton. Sin que Teabing le vea, abre el criptex y, una vez lee el mensaje, lo tira a lo alto para destruirlo. Semejante acción tiene un segundo propósito, distraer a Teabing que, in extremis, suelta la pistola para coger el objeto. En ese momento entran Fache y sus agentes, que han descubierto también la verdad sobre Teabing y se disponen a arrestarlo.
El desenlace de El Código Da Vinci
Gracias al mensaje que escondía el criptex, Robert y Sophie entienden que deben ir a Escocia, concretamente a la Rosslyn Chapel. Allí Neveu descubre todo su pasado.
Se encuentra primeramente con su hermano, que es el docente de la capilla. A ella le habían dicho que su familia había muerto en un accidente de coche, pero es mentira, su hermano había sobrevivido.
La otra persona relacionada con el pasado de Sophie es la guardiana de Rosslyn, Marie Chauvel Saint Clair. Esta mujer es en realidad la abuela de la protagonista, que le cuenta que tanto ella como su hermano son herederos directos de María Magdalena y Jesucristo.
Tanto uno como el otro había estado escondidos y protegidos por el Priorato, ya que sus vidas corrían peligro pues su existencia desmoronaba muchos preceptos cristianos.
Antes de acabar la novela, Robert une todos los mensajes que han ido encontrando. Descubre así el lugar exacto (en París) donde se encuentra el Santo Grial, es decir, la tumba de María Magdalena.
¿Por qué es interesante leer El Código Da Vinci?
Hay reseñas que consideran que Dan Brown no es un «buen» autor. Apenas incluye recursos literarios y su estilo no tiene «magia», simplemente sabe cómo narrar para conseguir que todo el mundo le lea. No obstante, El Código Da Vinci merece nuestra atención y resulta interesante por muchas razones.
Las teorías conspiranoicas
La conspiración del Santo Grial es el centro de la historia. El misterio alrededor de la descendencia de Jesucristo y lo que esto podría suponer a la Iglesia hacen que esta novela haya despertado mucho interés, y también muchas críticas.
Como es lógico, las comunidades religiosas cristianas, especialmente el Opus Dei (que no sale bien parado en El Código Da Vinci) han reprobado en múltiples ocasiones este libro. Consideran que todo es una parodia del cristianismo y que, a pesar de lo que su autor dice, no hay verdad en nada. De hecho, sobre todo ante el estreno de la película basada en la novela que dirigió Ron Howard y protagonizaron el actor Tom Hanks y la actriz Audrey Tatou, la iglesia católica llamó a su boicot.
La realidad es que Dan Brown sí se informó ampliamente y con creces sobre los ritos, el arte o las teorías que plantea. De hecho, no solo se informó sobre simbología y criptografía, sino que también entrevistó a miembros del Opus Dei. Además, al contar la historia a través de personajes ficticios, no difunde su obra como una tesis ni pretende sentar las bases de un nuevo conocimiento.
En cualquier caso, nos creamos o no cada palabra del autor, no podemos negar que esta novela se convirtió en un gran éxito editorial y ha dejado marca en la literatura de nuestros tiempos. De hecho, es el libro más vendido de la década de 2000-2010, seguida en el ranking por algunas entregas de la saga de Harry Potter.
¿Por qué Dan Brown escribió El Código Da Vinci?
Dan Brown ha reconocido públicamente que los conflictos internos de la Iglesia siempre le han atraído. Creció en una casa en la que ciertos temas religiosos se podían debatir, sin tener que aceptar los dogmas cristianos «porque sí». Esto le llevó a interesarse por otras teorías y por el conflicto, siempre presente, entre la ciencia y la religión.
Además, también guarda una especial fascinación por las sectas. Dan Brown vivió toda su infancia en New England, donde era muy común escuchar rumores sobre las hermandades de las universidades de la Ivy League y también sobre las comunidades masónicas. Esto le llevo a querer incorporar el tema de las organizaciones secretas y los rituales en El Código Da Vinci.
Concretamente, desarrollar la intriga sobre Da Vinci fue una idea que tuvo en su época de estudiante en España. Es entonces cuando empieza a descubrir las teorías sobre los símbolos escondidos en las obras del artista, despertando su interés por plasmar todo esto en una novela.
Lo más curioso es que Dan Brown es cristiano y, de alguna manera, a través de la historia y los personajes de este thriller conspiranoico, quiso compartir algunas de las dudas. También intentó (y logró) abrir debates sobre el funcionamiento de la Iglesia y su verdadera misión.
Todas las razones por las que Dan Bron escribió El Código Da Vinci están recogidas en este artículo.
El Código Da Vinci y sus muchas polémicas
Pensamos que solo hubo una polémica con El Código Da Vinci (la controversia con la Iglesia), pero también hubo una relacionada con los derechos de autor. La razón es que Dan Brown fue acusado hasta en dos ocasiones, por dos denunciantes diferentes, de haber plagiado parcial o totalmente otras obras.
Una de las denuncias que más peso tuvo fue la de los autores de El Enigma Sagrado. Esta obra de no ficción escrita por Michael Baigent y Richard Leigh plantea muchas de las teorías sobre Jesucristo y María Magdalena que Dan Brown incluye en su thriller superventas. El autor norteamericano sí había mencionado y confirmado que se había basado en este libro para el argumento de su obra, aunque negó una copia de su texto. La justicia terminó dándole la razón a Brown en un juicio sobre el que puedes leer más en este artículo de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual.
¿Qué nos aporta leer El Código Da Vinci?
Incluso las personas que no disfrutan leyendo, se engancharán a El Código Da Vinci. Dan Brown mantiene un estilo muy «peliculero» al escribir esta novela, llenándola de acción y de enigmas que, como lectores, estamos deseando descubrir. Sin duda, supo cómo escribir un libro inmersivo.
Quizá la gran genialidad de Dan Brown fue mezclar diferentes temas en una sola historia, poniendo en el centro la conspiración sobre el Santo Grial. Al combinar elementos de la novela de detectives con otros propios del ocultismo, crea una obra que hace que no podamos dejar de leer.
Recomendaríamos El Código Da Vinci a esa persona que necesita recuperar o revivir la emoción por la lectura. Esta novela es una de las que no deja dormir, de las que te hace dar mil vueltas a la cabeza y de las que te hace querer resolver, junto a los protagonistas, todos los misterios.
Más allá de la intensidad que supone leer El Código Da Vinci, esta obra nos deja aprendizajes importantes. Por ejemplo, hace evidente esa idea tan famosa de que la historia la escriben los vencedores. Podríamos decir que la Iglesia es la gran vencedora y que, según lo que de manera ficticia se plantea en la novela, ha decido escribir una historia y obviar otra.
Si después de leer este resumen de El código Da Vinci te han entrado ganas de leer la obra completa, apúntate a la legión de millones de lectores que disfrutaron de esta novela. Eso sí, si puedes, te recomendamos leerla en inglés. Aunque está traducida al español y a otros muchos idiomas, hay algunos enigmas que se entienden mejor en la versión original.
Lo que sí te aconsejamos es que valores hacerte con el libro electrónico, ya que las más de 500 páginas que tiene El Código Da Vinci hacen que sea un ejemplar algo pesado para llevar contigo.
4 comentarios en “Resumen del libro «El codigo Da Vinci» de Dan Brown”
No es posible que Dawn Brawn siendo cristianismo haya escrito algo tan controversial a Jesucristo por negar los evangelios Bíblicos y poner en polémica que no están todos los evangelios recogidos, además en la Convención de Nicea el rey Constantino, fue el creador de la Iglesia y Cristo esto es muy ridículo, pues las razones divinas de Jesus son para todos seran que el es el ungido de Dios Padre y nada mas.
Entendemos que «El código Da Vinci» de Dan Brown es una novela que ha generado controversia debido a su interpretación de ciertos aspectos históricos y religiosos. Destacamos que esta obra es una ficción y no debe tomarse como una representación precisa de eventos históricos o creencias religiosas.
En la novela, Dan Brown aborda temas controvertidos y presenta una trama emocionante y llena de misterio. Explora teorías alternativas sobre la historia y la religión, lo que ha llevado a diferentes reacciones por parte de los lectores y de diversos grupos.
Agradecemos tu comentario y respetamos las opiniones y creencias de cada individuo. Nuestro objetivo es proporcionar información objetiva y entretenida para que los lectores puedan disfrutar de la literatura y abrir sus mentes a diferentes perspectivas.
¡Gracias por ser parte de nuestra comunidad y por tu interés en nuestros resúmenes literarios! 📚🌟
La novela discurre con atractivo, es cierto. Pero el fragmento en que los protagonistas deben averiguar qué un mensaje está escrito en espejo me parece que le quita coherencia interna a la historia. Un experto en simbología en Harvard y una criptógrafa de la Surete no podrían tardar quince minutos en percatarse de un truco tan infantil y encima hacerlo por casualidad. Por si fuera poco les debía de ser obvio el daño histórico de que Leonardo mismo utilizaba la escritura en espejo
¡Hola Robert!
😊 Agradecemos tu comentario y tu perspectiva sobre «El código Da Vinci» de Dan Brown. Es cierto que en la trama, hay momentos que pueden generar interrogantes en cuanto a la credibilidad de los personajes, como el caso que mencionas del mensaje en espejo.
La literatura a menudo nos lleva a explorar situaciones y giros que pueden requerir un poco de suspensión de la incredulidad, incluso en libros con personajes altamente capacitados. Cada lector tiene su propia visión de cómo deberían reaccionar los personajes en una historia, y es genial que compartas tu punto de vista.
Si tienes más comentarios o preguntas sobre el libro o cualquier otro tema literario, ¡no dudes en compartirlos! Además, te invitamos a suscribirte a nuestro canal 📚 para no perderte futuros resúmenes y a compartir este video con otros entusiastas de la lectura. ¡Gracias por ser parte de nuestra comunidad! 🎥📖